Hoy toca hablar de un aspecto importantísimo en la vida de los niños: El Cole.

Basta con pensar que pasan la mayor parte del día dentro del Cole, y ahí aprenden de los profesores, pero también de los compañeros.

En el caso de niños con problemas, el caso se complica, ya que además de las asignaturas (adaptadas o no al nivel de cada uno), si hay suerte y el colegio cuenta con medios, el niñ@ va a recibir también sesiones de pedagogía terapeútica, audición y lenguaje, etc.

En nuestro caso, la enfermedad de Irene es una enfermedad metabólica que le afecta al sistema nervioso (SSADH, que afecta al GABA, uno de los principales neurotransmisores), así que conocemos todas esas sesiones, y valoramos su utilidad.

Hace unos años, nos plantearon cambiar a Irene a un colegio de Educación Especial. Eso supuso una temporada con mucha angustia, buscando un colegio que se adaptara a sus necesidades, y no fue nada sencillo. Pasamos dos años visitando colegios de Educación Especial y Ordinarios. Al final y con mucho esfuerzo, nos decidimos y conseguimos cambiarla a otro colegio ordinario y parece que hemos acertado, y estamos muy contentos de cómo funciona este colegio.

Llevamos 2 años en el Colegio Sagrado Corazón Vedruna, en Valencia (junto a las Torres de Serrano), y estamos contentísimos, no solo con el trabajo que hacen con Irene los profesionales del Cole, sino también con los compañeros de clase, con los padres y las madres.

La verdad es que podría poner un montón de ejemplos sobre buenas experiencias, a todos los niveles. Desde el director, hasta las actividades extraescolares, pasando por la PT, la AL, tutoras, los profesores… pero creo que una imagen vale más que mil palabras, y servirá para demostrar de lo que os hablamos.

En las fotos podéis ver a Irene, participando en las “Olimpiadas Vedruna”, una salida que hacen todos los años por el antiguo cauce del río Turia. El profe de educación física, nos dijo unos días antes, que quería que Irene hiciera la misma prueba que sus compañeros, que ella la haría a su ritmo, pero que él creía que podía aguantar. Las dos chicas que van a su lado corriendo son sus tutoras, una es la del año pasado y la otra la de este año, el profe de educación física les había pedido que corrieran con ella. Iban animando a Irene, que este año por primera vez ha corrido 400 metros!!.

Los niños que van alrededor, son compañeros (y amigos) de Irene, que dieron su vuelta y luego volvieron para correr con Irene y animarla.

El resultado es que Irene lo consiguió!! :-). Lo hizo despacito, pero de un tirón, y entró a la meta con una sonrisa de oreja a oreja. Después, los compañeros la felicitaron, y se firmaron las camisetas (que luego en casa no se quería quitar, y que ha enseñado orgullosa a toda la familia).

Con un año y medio nos dijeron que no sabían si andaría, con 3 aún no andaba sola y ahora con 8 años ha hecho una carrera de resistencia con sus compañeros de clase. Esto ha sido gracias al esfuerzo de muchos, Irene la primera, y también ha sido una recompensa para muchos. La llegada a la meta fue muy, muy emocionante.

Como el anuncio de Mastercard… hay cosas que el dinero no puede comprar.

Sabemos que con el paso del tiempo, la brecha que separa a Irene de sus compañeras puede hacerse mayor, y no podrá seguir con ellas eternamente…. pero hasta que eso pase, nosotros estamos MUY contentos del tesoro que hemos encontrado en este Cole.

Nada más, esperamos que cunda el ejemplo, y en el resto de colegios se practique la inclusión escolar, porque de verdad pensamos que, si el resultado es un aula como la de Irene, con ese nivel de compañerismo y con el buen rollo que destilan, es algo por lo que merece la pena luchar.

Un abrazo a todos, en especial a los Vedrunos!!! 🙂